INFOR Q10
PRATER
Multivitamínico con coenzima Q10.
Descripción.
Es una asociación polivitamínica con procaína clorhidrato, rutina, extracto de ginseng, oligoelementos, asociados a coenzima Q10, componente esencial de las mitocondrias actuando como un cofactor en la cadena de la respiración celular del cual deriva el ATP y la energía metabólica. Necesidades especiales y funciones de los micronutrientes: se ha podido establecer para cada micronutriente, un rango de necesidades promedio diaria. Estas necesidades diarias están calculadas para individuos sanos estándar sin condiciones patológicas o fisiológicas particulares. Sin embargo, junto a esta situación estándar se encuentra un grupo de casos particulares en los cuales estas necesidades de micronutrientes pueden estar aumentadas. Entre estas situaciones se encuentran: embarazadas, adolescentes, niños y adultos con déficits nutricionales generalizados específicos, convalecientes de enfermedades sistémicas, pacientes portadores de enfermedades crónicas con compromiso nutricional, pacientes con lesiones que requieren procesos reparativos, deportistas y profesionales que impliquen esfuerzos físicos sobre los promedios normales.
Composición.
Cada cápsula contiene: clorhidrato de procaína 25mg; extracto estandarizado de ginseng 40mg (equivalente a 200mg de raíz de Panax ginseng); vitamina A 5.000UI; vitamina B1 2,5mg; vitamina B2 2,2mg; vitamina B6 1,05mg; vitamina B12 1,15mcg; vitamina C 30mg; vitamina D2 440UI; vitamina E 10,5mg; ascorbato de nicotinamida 20mg; pantotenato de calcio 17,5mg; rutina 10mg; ácido fólico 1mg; hierro 10,8mg; calcio 90,58mg; flúor 0,09mg; cobre 1,11mg; potasio 8,08mg; manganeso 1,12mg; magnesio 14,33mg; zinc 0,201mg; cobalto 0,05mg; molibdeno 0,051mg; coenzima Q10 10,00mg; colina inositol, ácido linolénico y ácido linoleico (contenidos como lecitina) 15mg.
Propiedades.
Acción metabólica y síntomas de déficit de micronutrientes: vitamina A: función principal: las principales funciones de la vitamina A son: participación en el ciclo de los pigmentos retinales, fomento del crecimiento, maduración y diferenciación de los epitelios, crecimiento óseo; actividad reproductiva; desarrollo embriónico. La principal fuente natural de vitamina A es el caroteno, pigmento complejo de ciertas plantas que origina por partición 2 moléculas de retinol. Vías metabólicas que involucran a la vitamina A:
Deficiencia o exceso: deficiencia: ceguera nocturna o total, ulceración de la córnea, bronquitis crónica, litiasis urinaria, diarrea, keratinización de la piel, deformidades óseas. Causas de deficiencia: desnutrición; enfermedad celíaca, cirrosis; gastrectomía. Hipervitaminosis (3 a 6mg/día > 2 años): no debe exceder 7,5mg/día. Síntomas: dermatitis, caída del pelo; dolores óseos, hemorragias. Vitamina B1 (tiamina): función principal: coenzima en la descarboxilación de los ceto-ácidos (piruvato/cetoglutarato) y en la utilización de la pentosa en el shunt hexosa/monofosfato. En resumen, es esencial en la función de las vías principales que obtienen energía de la glucosa. Además participa como modulador de la neurotransmisión. Deficiencia: beri-beri (frecuentemente en el alcohólico): neuritis periférica; debilidad y/o parálisis muscular. Depresión, alteración de la memoria. Palpitaciones; alteraciones del ECG. Vitamina B2 (riboflavina): función principal: rol vital en el metabolismo como cofactor para una gran variedad de enzimas respiratorias (en la cadena respiratoria, vía vital para la síntesis del ATP). Deficiencia: sequedad de garganta, estomatitis. Glositis, dermatitis seborreica. Anemia, neuropatía. Acido nicotínico: función principal: síntesis de los cofactores nicotinamida adenín dinucleótico (NAD) y nicotinamida adenín dinucleótido fosfato (NADP). Estos son cofactores que participan en múltiples reacciones de óxido-reducción como aceptores o donantes de hidrógeno. Deficiencia: pelagra. Dermatitis; diarrea; demencia. Rash dérmico en zonas expuestas a la luz. Vitamina B6 (piridoxina): función principal: el fosfato del piridoxal cubre una serie de funciones como coenzima en la transformación metabólica de aminoácidos (descarboxilación, transaminación, racemización); también en el metabolismo de aminoácidos específicos como triptófano, hidroxiaminoácidos y a.a. que contienen azufre. Deficiencia: (alcohólicos): dermatitis, hiperkeratosis. Lesiones seborreicas-dérmicas. Convulsiones y neuropatía periférica. Anemia macrocítica. Hipervitaminosis: sólo con cantidades extremadamente altas (en el rango de 2 a 6g/kg) pueden producirse convulsiones. Vitamina B12: función principal: da origen a 2 coenzimas importantes: metilcobalamina y deoxiadenosil cobalamina. Esta última participa activamente en el metabolismo energético del ciclo de Krebs, importante en el proceso de combustión de hidratos de carbono y lípidos. La metilcobalamina es esencial para el normal metabolismo del folato que conduce a la síntesis de purinas y pirimidinas y por lo tanto del DNA. Deficiencia: anemia macrocítica. Neuropatía que puede llegar a ser irreversible (alteración de sensibilidad profunda, parestesias, alteración de los reflejos osteotendíneos). Alucinaciones y comportamiento psicótico. Acido fólico: función principal: compuesto esencial para la síntesis de DNA, actuando cooperativamente con las coenzimas aportadas por la vitamina B12. Deficiencia: iguales alteraciones hematológicas que la deficiencia de vitamina B12. Muy rara vez llegan a existir alteraciones neurológicas (en este sentido, estas alteraciones que se producen con hipovitaminosis B12, son independientes de las vías metabólicas en que participa el ácido fólico). Pantotenato de calcio: función principal: el ácido pantoténico es el precursor de la coenzima A, cofactor necesario para una gran cantidad de reacciones químicas tales como la oxidación de carbohidratos (principal fuente de obtención energética), la gluconeogénesis, la síntesis y degradación de ácidos grasos, y la síntesis de esteroles (como el colesterol), hormonas esteroidales y porfirina. Deficiencia: degeneración neuromuscular; insuficiencia córtico suprarrenal y muerte. Fatiga, cefalea, disturbios del sueño, anorexia, náuseas y dolores abdominales. Vitamina C (ácido ascórbico): función principal: el ácido ascórbico actúa en un sinnúmero de reacciones que involucran oxidación. Por ejemplo, se necesita para la incorporación de la hidroxiprolina en la síntesis del colágeno; en la oxidación de la lisina para la síntesis de la carnitina; en la síntesis de esteroides adrenales; en la conversión de ácido fólico a folínico, etc. Deficiencia: (escorbuto). Hiperkeratosis folicular, hemorragias; pérdida de dientes, gingivitis, anemia. Vitamina D: función principal: cumple un rol principal en la regulación del calcio, tanto en su absorción y fijación ósea, como en su concentración sérica. En condiciones en que exista llegada de la luz solar a la piel, puede ser sintetizada a ese nivel sin que probablemente se necesite aporte externo. De allí es activada sucesivamente por el hígado y por el riñón hasta llegar al calcitriol, la forma activa. Una vez activa actúa facilitando la absorción de calcio y fósforo intestinal, favoreciendo su transporte y fijación ósea e inhibiendo su excreción renal. En este proceso se mantienen concentraciones plasmáticas adecuadas para la función neuromuscular y un sinnúmero de otras funciones dependientes de calcio. Deficiencia: (raquitismo en el niño). Absorción inadecuada de calcio y fosfatos. Descalcificación ósea por exceso de hormona paratiroidea. Falla de mineralización de la matriz ósea con deformidades. En el adulto la situación equivalente se denomina osteomalacia. Hipervitaminosis: hipercalcemia (con toxicidad cardíaca secundaria), fatiga, lasitud, cefalea, náuseas, vómitos, diarrea. Poliuria, polidipsia. Nefrolitiasis. Nefrocalcinosis, déficit de crecimiento. Calcio: función principal: es el 5° elemento más importante del organismo. Es útil por su función estructural formando la parte ósea mineralizada y en un sinnúmero de funciones en las que actúa en pequeñísimas cantidades, lo que justifica su denominación de micronutriente. Es esencial para la función excitatoria neuronal y para la contracción muscular. Modula la liberación de varios neurotransmisores. Participa en la condición rítmica y contractibilidad cardíacas. Mantiene la integridad de membranas. Regula la coagulación sanguínea y modula una gran cantidad de funciones intracelulares. Deficiencia: (aguda): tetania, parestesias, hiperexcitabilidad neuromuscular, convulsiones. (Crónica): raquitismo, osteomalacia, alteración de conformación ósea, cataratas. Cobre: función principal: coopera con el metabolismo del hierro en la hematopoyesis. Deficiencia: anemia, leucopenia. Exceso: cardiomiopatías, gota. Cinc: función principal: cofactor enzimático en síntesis de proteínas y nucleoproteínas. Metabolismo de alcohol. Deficiencia: retardo del crecimiento, alopecia, dermatitis, diarrea, disfunción inmunológica, atrofia gonadal. Hierro: función principal: es un componente esencial de la hemoglobina (80% del hierro ocupa esa función); pero además participa como un componente esencial de la mioglobina, citocromos, catalasas y peroxidasas. Participa también como componente de las enzimas metal flavo proteínas que incluyen la xantino-oxidasa. Deficiencia: anemia microcítica, hipocrómica. Alteraciones del metabolismo muscular. Dificultades del aprendizaje y alteraciones conductuales. Exceso agudo (2 a 10g): puede ser fatal. Diarrea, dolores abdominales, cianosis, hiperventilación, alergia aguda, colapso cardiovascular. Crónico: insuficiencia hepática, diabetes, atrofia testicular, artritis, miocardiopatía. Manganeso: función principal: el manganeso actúa como un activador de enzimas y como componente de metaloenzimas que participan en fosforilación oxidativa y en el metabolismo de ácidos grasos, colesterol y mucopolisacáridos. Deficiencia: alteraciones del sistema esquelético, SNC, y gónadas. Tendencia a las hemorragias. Molibdeno: función principal: se desconoce su participación metabólica. Déficit: ¿cáncer esofágico? Magnesio: función principal: es el segundo catión en importancia del líquido intracelular. Esencial para la actividad de un sinnúmero de enzimas, para la transmisión neuronal y la excitabilidad muscular. Actúa como cofactor de todas las enzimas involucradas en las reacciones de transferencia de fosfato que utilizan ATP. También en la unión de macromoléculas a organelos intracelulares como por ejemplo el mRNA a los ribosomas. Hipomagnesemia: alteraciones del ritmo cardíaco y de la contractilidad muscular. Nefrocarcinosis: desarrollo de hipokalemia e hipocalcemia resistentes. Delirium tremens; convulsiones. Hipermagnesemia: debilidad muscular, hipotensión, alteraciones del ritmo cardíaco, sedación, confusión. Potasio: función principal: es un electrolito extremadamente importante en la mantención del balance y distribución del agua, balance ácido-base, función de la célula muscular y nerviosa, función cardíaca, renal y adrenal. Es esencial en la conversión del azúcar de la sangre en glicógeno. La bomba sodio-potasio mantiene la carga eléctrica dentro de la célula. Sobre el 95% del potasio del cuerpo está en el interior de la célula. Potasio, sodio y cloruro son 3 electrolitos estrechamente ligados y su metabolismo está íntimamente interrelacionado. Deficiencia: caracterizada por debilidad muscular, fatiga, confusión mental, irritabilidad, debilidad, alteraciones cardíacas, problemas en la conducción nerviosa y en la contracción muscular. El ejercicio prolongado en un ambiente cálido puede producir una pérdida significativa de potasio. Cobalto: función principal: corresponde a un elemento traza. Es un componente de la vitamina B12, que una vez ingerida es metabolizada a la forma de coenzima B12. Deficiencia: no se describen casos de déficit de este elemento traza. Flúor: función principal: se han obtenido resultados controvertidos en la determinación de los requerimientos de flúor en los animales. Sin embargo no se discute la importancia de la incorporación de flúor en el agua como una medida para reducir la incidencia de caries en niños. Deficiencia: no se han descrito estados de deficiencia en humanos. Exceso: puede llevar a la toxicidad aguda o crónica, esta última caracterizada por cambios en la estructura de los huesos y moteado del esmalte de los dientes. Vitamina E (alfa tocoferol): función principal: tiene efecto antioxidante, lo que implicaría una acción protectora sobre generación de radicales libres. Deficiencia: esterilidad, masculina y femenina, abortos espontáneos, anemia macrocítica, anemia hemolítica. La vitamina E es una de las vitaminas que tiene un rol muy importante en el organismo como antioxidante. Mecanismo de acción: vitamina E podría participar como un antioxidante en la membrana celular previniendo la oxidación propagada de ácidos grasos no saturados (Spielberg et al. 1979). Se postula que la vitamina E, reduce la aterosclerosis y por lo tanto la enfermedad coronaria impidiendo los cambios oxidativos de las lipoproteínas de baja densidad (LDL). Las partículas de LDL oxidadas son más rápidamente convertidas por los macrófagos que el LDL nativo, a células espumantes cargadas de colesterol que se encuentran en forma precoz en la patología de la arterosclerosis. También la vitamina E como antioxidante protege a otras sustancias sensibles a la oxidación como la vitamina A y el ácido ascórbico. Se ha observado que los niveles sanguíneos bajos de tocoferol están generalmente asociados con un aumento de la sensibilidad de eritrocito a la hemólisis (in vitro) frente a los agentes oxidantes. La absorción de la vitamina E depende de la presencia de bilis, y sólo 20 a 60% es absorbido. Rutina (sinónimo: rutósido): es un flavonoide obtenido de Ruta graveolens. También se denomina rutósido y corresponde a un principio activo de Ruta graveolens L. (1 a 2%). Esta sustancia tiene propiedades venotónicas y vasoprotectoras. La ruda también tiene aceite esencial (0,1%) que tiene una acción emenagoga que puede llegar a ser abortiva según la dosis, vermífuga y rubefaciente-revulsiva en uso externo. Las furanocumarinas son responsables de su acción espasmolítica. La rutina mejora la permeabilidad capilar en la insuficiencia venosa, es un buen coadyuvante en el tratamiento de las várices y hemorroides. La rutina actúa sobre la pared capilar, aumentando su resistencia y normalizando su permeabilidad. Extracto de ginseng: corresponde a la raíz de Panax ginseng y contiene como principios activos los ginsenósidos; estos compuestos producen: estimulación de la secreción de corticotropinas y síntesis de proteínas. Además estimula el sistema inmune. Aumenta el título de anticuerpos y la actividad de las células killer (Scaglione et al. 1996). El extracto de Panax ginseng tiene por lo menos 13 ginsenósidos, cuyo núcleo se parece al de los esteroides. Se denomina también adaptógeno, porque capacita al organismo para adaptarse al estrés y normaliza además la función tiroidea y hormonal en general. Ginseng produce efectos ergogénicos, como un aumento de la performance y propiedades antifatiga (Sieguel, 1979). Procaína clorhidrato: es un principio activo que por vía oral se hidroliza a dietilaminoetanol, sustancia que presenta una acción antidepresiva y psicoenergizante. Coenzima Q10: también conocida como ubidecarenona, es un componente esencial de la mitocondria, la unidad productora de energía de las células del organismo. El aporte de CoQ10 de las fuentes dietarias es insuficiente para producir efectos clínicos obervados con altas dosis. Los niveles plasmáticos en los vegetarianos son considerablemente mayores que en los omnívoros, lo que indica que la ingesta mayor de vegetales puede preservar altos niveles de CoQ10. Aun cuando el organismo puede sintetizar CoQ10, pueden presentarse estados deficitarios derivados de insuficiente síntesis de CoQ10 como resultado de hábitos nutricionales o de defectos genéticos o adquiridos. También el déficit de CoQ10 puede derivar en necesidades aumentadas de los tejidos, ocasionadas situaciones normales o patológicas de mayor esfuerzo que el normal. Por otra parte, en el anciano puede haber aumento de los requerimientos debido a que los niveles de la coenzima Q10 puede declinar con la edad avanzada. Actúa además como un antioxidante específicamente en la protección de la peroxidación de los lípidos de la membrana celular y de los lípidos plasmáticos. Es generalmente bien tolerada y no se han reportado efectos adversos serios con el uso prolongado de CoQ10. No se conocen interacciones adversas de CoQ10 con medicamentos o nutrientes, más bien ésta trabaja en forma sinérgica con algunos o puede mitigar los efectos adversos de algunas drogas. Sin embargo, algunas drogas pueden afectar negativamente los niveles de CoQ10.
Indicaciones.
Estrés físico y mental, deficiente capacidad de concentración, bajo rendimiento intelectual, rápida fatigabilidad. Manifestaciones de involución, agotamiento, pérdida de memoria, trastornos del sueño. Terapia complementaria en climaterio femenino y masculino. Coadyuvante en tratamiento de obesidad y en dietas restringidas. Complemento alimentario de vitaminas y minerales. Indicado especialmente cuando se requiere un aporte adicional de coenzima Q10, potente antioxidante. Indicación clínica: tratamiento y profilaxis de estados carenciales de vitaminas y minerales asociados a estrés o agotamiento físico y mental con potencial acción antioxidante.
Dosificación.
Dosis: según prescripción médica. Vía: oral. Dosis usual: 1 cápsula al desayuno. Se aconseja mantener el tratamiento por un período de 10 semanas o de acuerdo al criterio médico.
Contraindicaciones.
No usar en pacientes que presenten hipersensibilidad a alguno de los componentes de la formulación o que sufran cualquier patología que pueda aumentar la hipersensibilidad a los componentes de la formulación. No administrar en pacientes con hipervitaminosis (especialmente hipervitaminosis A y/o D) alcoholismo crónico, cirrosis, daño hepático severo, hepatitis viral. No usar en pacientes que padezcan patologías en las cuales esté contraindicada la administración de alguno de los principios activos del producto.
Efectos colaterales.
A las dosis recomendadas es poco probable la aparición de reacciones adversas. Pueden aparecer casos aislados de manifestaciones de intolerancia gástrica como náuseas y/o vómitos. También pueden presentarse cuadros dermatológicos caracterizados por prurito. En algunas personas con alto grado de hipersensibilidad, puede aparecer un ligero efecto estimulante del sistema nervioso central. La administración aguda o crónica de vitamina D o análogos, o una sensibilidad aumentada a ella, puede conducir a una hipervitaminosis D que se manifiesta por hipercalcemia.
Precauciones.
Mantener alejado del alcance de los niños. Usar con precaución en pacientes con alteraciones renales y/o hepáticas o con obstrucción biliar. Usar con precaución en pacientes con antecedentes de síndrome jaquecoso. Se puede producir coloración oscura de las deposiciones por el hierro de la formulación. Deben tenerse en cuenta las dosis totales administradas en caso de asociación con otras preparaciones que contengan vitaminas en especial A y D. No se recomienda el uso de estos productos multivitamínicos en tratamientos prolongados de carencias vitamínicas en alcohólicos. En caso de daño renal crónico, las concentraciones séricas de vitamina A están aumentadas lo que aumenta el riesgo de hipersensibilidad. El uso de vitamina en casos de hipercalcemia, hipervitaminosis D, osteodistrofia renal con hiperpotasemia y riesgo de calcificación metastásica sólo puede indicarse si es absolutamente necesario. Se debe evaluar el riesgo beneficio del uso de vitamina D en presencia de arteriosclerosis, daño cardíaco, hiperfosfatemia, daño renal, sarcoidosis y algunas enfermedades granulomatosas. Se debe evaluar el riesgo beneficio del uso de tocoferol acetato en casos de hipoprotrombinemia debida a falta de vitamina K, por cuanto dosis excesivas pueden agravar el cuadro. Se debe evaluar el riesgo beneficio del uso de vitamina C en casos de algunas enfermedades hematológicas, cálculos renales, deficiencia de glucosa-6-fosfato deshidrogenasa. Debe usarse con precaución la tiamina clorhidrato en casos de encefalopatía de Wernicke. La niacinamida debe usarse con precaución en presencia de sangramiento o hemorragia arterial, glaucoma, diabetes mellitus, gota, daño hepático, hipotensión, úlcera péptica. Uso en pediatría: este medicamento no está recomendado para ser usado en niños menores de 12 años. Los niños en general presentan una mayor sensibilidad a medicamentos, lo que también sucede con vitaminas y minerales. Los requerimientos diarios varían de acuerdo a la edad y una administración prolongada en forma innecesaria puede afectar el desarrollo del niño. Uso en embarazo y lactancia: no se recomienda el uso de este medicamento durante el embarazo y la lactancia. Aun cuando no se han reportado problemas con la ingesta diaria normal de vitaminas y minerales. Las vitaminas y minerales pueden atravesar la placenta y en casos de sobredosis alcanzar niveles importantes en el feto, lo que puede causar alteraciones en su desarrollo. En animales se han reportado malformaciones en el feto por el uso de sobredosis de vitamina A y D durante la gestación.
Interacciones.
A las dosis recomendadas del producto, no se observan interacciones de importancia con otros medicamentos. Sin embargo en dosis mayores pueden presentarse algunas interacciones: las dosis altas de coenzima Q10 puede modificar las necesidades de insulina o de hipoglucemiantes orales en pacientes diabéticos. Vitamina A: con colestipol, aceite mineral, neomicina oral, contraceptivos orales, etretinato, tetraciclina y vitamina E. Alfatocoferol: con anticoagulantes, colestitramina, colestipol, aceite mineral, compuestos de hierro y vitamina A. Acido ascórbico: con algunos anticoagulantes, deferoxamina, disulfiramo, vitamina B12. Riboflavina: con alcohol, antidepresivos tricíclicos, fenotiazinas, probenecid. Piridoxina: con cicloserina, etionamida, hidralazina, adrenocorticoides, azatioprina, clorambucil, ciclofosfamida, ciclosporina, isoniazida, penicilamina, estrógenos, levodopa. Cianocobalamina: con alcohol, aminosalicilatos, colchicina, antibióticos, ácido ascórbico, ácido fólico. Niacinamida: con lovastatina, provastatina, simvastatina. Acido fólico: con analgésicos, anticonvulsivantes, hidantoína, carbamazepina, estrógenos, antiácidos con aluminio o magnesio, antibióticos, colestiramina, metotrexato, triamtereno, trimetoprim, sulfonamidas y suplementos de cinc. Sales de hierro: con antibióticos tipo ciclinas, difosfonatos, medicamentos gastrointestinales.
Sobredosificación.
No se han descrito casos de sobredosis. En casos de una administración significativa, se espera que se presenten efectos adversos aumentados como estimulación del sistema nervioso central, manifestaciones vasculares como mareos y cefaleas. Se debe suspender la administración y aplicar una terapia sintomática controlando los signos vitales.
Presentación.
Envase conteniendo 30 cápsulas blandas.