Hierro sulfato

Sinónimos.

Sulfato ferroso.

Acción terapéutica.

Antianémico.

Propiedades.

El sulfato ferroso es una sal inorgánica que contiene 20% de hierro. Se utiliza como fuente de ese mineral. Debe conocerse la cantidad total de hierro de cada preparado y no su masa total. La mayor ventaja del uso parenteral del hierro es la posibilidad de formar con rapidez reservas del elemento que por vía oral tardarían meses en alcanzarse (por ejemplo, en pacientes que recibirán eritropoyetina). El intestino delgado regula la absorción y previene la entrada de gran cantidad de hierro al torrente sanguíneo.

Indicaciones.

Anemias ferropénicas o ferroprivas.

Dosificación.

Dosis terapéutica usual: 200mg-300mg de hierro/día (2mg/kg a 3mg/kg) en 3 tomas diarias sobre la base del contenido de hierro del preparado. Para prevención: 15mg/día a 30mg/día. La dosis máxima diaria es de 1.200mg. La respuesta a la terapéutica con hierro se evalúa mediante el índice de producción de reticulocitos y la elevación de la hemoglobina o del hematócrito. No debe tomarse una decisión acerca de la efectividad del tratamiento hasta después de transcurridas 3 a 4 semanas. El empleo profiláctico del hierro oral debe reservarse para pacientes con alto riesgo: embarazadas, pérdida menstrual excesiva, dadores de sangre y lactantes.

Reacciones adversas.

La intolerancia a los preparados orales de hierro es en especial una función de la cantidad de hierro soluble presente en el tracto gastrointestinal y de factores psicológicos. Pirosis, náuseas, vómitos, malestar gástrico superior, constipación y diarrea. Con dosis altas son más comunes las náuseas y el dolor abdominal. Heces oscuras teñidas por el hierro. Hemocromatosis, sólo en pacientes con trastornos en la absorción del hierro. La sobredosis de hierro es en particular grave en los niños, ya que se requiere atención inmediata si la ingestión ha superado los 30mg/kg. El tratamiento se realiza con deferroxamina.

Precauciones y advertencias.

Debe tenerse especial cuidado en pacientes que puedan desarrollar una sobrecarga de hierro, como pueden ser aquellos con hemocromatosis, anemia hemolítica o aplasia eritrocitaria. En caso de falla en la respuesta al tratamiento, deben investigarse otras causas de anemia. No conviene usar el hierro durante el primer trimestre del embarazo o en pacientes con carcinoma gástrico, colitis ulcerosa o úlcera gastroduodenal.

Interacciones.

El hierro forma quelatos con las tetraciclinas, disminuyéndose la absorción de ambos. Su absorción es menor en presencia de penicilamina y antiácidos. Por potenciales interacciones, conviene separar en varias horas la administración de hierro y otros fármacos.

Contraindicaciones.

Hipersensibilidad al hierro. Pacientes con sobrecarga de hierro.