Indometacina

Acción terapéutica.

Antiinflamatorio no esteroide. Uteroinhibidor.

Propiedades.

La indometacina es un antiinflamatorio no esteroide derivado del ácido indolacético. Inhibe la actividad de la enzima ciclooxigenasa para disminuir la formación de precursores de prostaglandinas y tromboxanos a partir del ácido araquidónico. Aunque muchos de sus efectos terapéuticos y adversos se producen por la inhibición de la síntesis de prostaglandinas en distintos tejidos, otras acciones contribuyen en forma significativa a los efectos terapéuticos del medicamento. Como analgésico: por acción periférica debido a la inhibición de la síntesis de prostaglandinas. Antirreumático: la producción del factor reumatoide IgM puede disminuir con indometacina; sin embargo, la droga no afecta el curso progresivo de la artritis reumatoidea. Sólo actúa por mecanismos analgésicos y antiinflamatorios. Antipirético: por la acción central sobre el centro hipotalámico que regula la temperatura, produciendo vasodilatación periférica. Antidismenorreico: inhibe la síntesis de prostaglandinas en el útero, lo que disminuye las contracciones uterinas, aumenta la perfusión uterina y alivia la isquemia y el dolor espasmódico. En la forma de administración oral se absorbe de manera rápida y completa, 90% de la dosis en 4 horas. Supositorios: de absorción más rápida que las cápsulas pero sólo en 80% o 90% de una dosis debido a que el supositorio no se retiene en el recto durante 1 hora completa. Se metaboliza en el hígado, excretándose el 60% de la dosis por la orina (10 a 20% como indometacina inalterada) y el 33% por vía biliar (el 1,5% como indometacina inalterada). Se excreta también en la leche materna y no es dializable.

Indicaciones.

Fase activa de la artritis reumatoidea, osteoartritis, espondilitis anquilosante. Alteraciones musculoesqueléticas (bursitis, tendinitis, sinovitis). Procesos inflamatorios posteriores a intervenciones ortopédicas. Síndrome dismenorreico. Amenaza de parto prematuro.

Dosificación.

Las dosis mayores de 150 a 200mg/día pueden aumentar el riesgo de efectos adversos. En pacientes geriátricos mayores de 70 años reducir la dosificación inicial, hasta la mitad de la dosis usual en el adulto. Siempre se debe administrar en forma oral, después de las comidas o con alimentos o antiácidos para reducir la irritación gastrointestinal. Iniciar el tratamiento con 2mg a 50mg dos a cuatro veces al día, se puede aumentar de 25mg a 50mg en intervalos semanales hasta obtener respuesta satisfactoria. Dosis máxima 200mg/día. Dosis pediátricas usuales: oral de 1,5mg a 2,5mg/kg/día, en 3 o 4 tomas, hasta un máximo de 4mg/kg/día. Supositorios: 50mg hasta 4 veces/día.

Reacciones adversas.

Las reacciones neurológicas son: cefaleas, mareos, depresión, vértigo y fatiga; con menor frecuencia: confusión mental, ansiedad, somnolencia, convulsiones, coma, neuropatía periférica, debilidad muscular y rara vez parestesias y empeoramiento de la epilepsia y parkinsonismo. En algunos casos la intensidad de esta sintomatología puede obligar a suspender el tratamiento. Síntomas gastrointestinales: náuseas, anorexia, vómitos, molestias epigástricas, constipación y diarrea. Pueden aparecer ulceraciones en esófago, estómago, duodeno o intestino delgado; hemorragia gastrointestinal. Muy rara vez se observó estomatitis, flatulencias o hemorragias de origen sigmoideo. Diversos estudios han indicado que la dosificación recomendada más elevada de indometacina por vía oral (50mg, 4 veces por día) produce menos pérdida de sangre en las heces que la dosis media de ácido acetilsalicílico (600mg, 4 veces por día). Hepáticas: en raras ocasiones se observaron cuadros de hepatitis o ictericia relacionados con la administración de indometacina. Cardiovasculares o renales: con poca frecuencia edema, elevación de la presión arterial, taquicardia, dolor precordial, arritmia, hipotensión, insuficiencia cardíaca congestiva. Reacciones de hipersensibilidad, con signos de erupciones cutáneas, dermatitis exfoliativas, prurito, urticaria, trastornos respiratorios agudos, disnea. Hemáticas: puede aparecer: leucopenia, petequias, púrpura, trombocitopenia. Otras reacciones: trastornos de la audición, proteinuria, nefritis intersticial, hiperglucemia, glucosuria, visión borrosa y dolor orbitario o periorbitario. Bronconstricción en asmáticos sensibles al ácido acetilsalicílico.

Precauciones y advertencias.

Deberá emplearse con precaución en los ancianos, la incidencia de reacciones adversas parece aumentar con la edad. Al inicio del tratamiento pueden aparecer cefaleas que desaparecen en su transcurso; de persistir deberá suspenderse la medicación. Por el riesgo de mareos, se advertirá al paciente para que tenga precaución en el manejo de vehículos o maquinarias. Se deberá controlar al paciente con alteraciones psiquiátricas, enfermedad de Parkinson o epilepsia, ya que puede agravar estos estados. Las alteraciones gastrointestinales se minimizan al ingerir la droga con las comidas o con antiácidos. Ante la aparición de sangrado intestinal se suspenderá el tratamiento. La indometacina inhibe la agregación plaquetaria, por lo que este efecto deberá tenerse en cuenta en pacientes con alteración de la coagulación o bajo terapéuticas anticoagulantes. Debe ser usada con prudencia en pacientes con insuficiencia renal o con retención sódica asociada con enfermedad hepática o insuficiencia cardíaca. Como con otros antiinflamatorios no hormonales debe esperarse una elevación de GOT y GPT, fosfatasa alcalina y otros parámetros de la función hepática. En tratamientos crónicos se deberá controlar en forma periódica el cuadro hemático y la función hepática.

Interacciones.

El ácido acetilsalicílico puede disminuir los niveles plasmáticos de indometacina. El probenecid eleva los niveles de indometacina, por lo que puede ser necesario disminuir la dosis en el tratamiento conjunto. Puede reducir la acción antihipertensiva de los betabloqueantes, los diuréticos tiazídicos, la furosemida o el captopril. Puede aumentar los niveles sanguíneos de litio, en pacientes bajo tratamiento de mantenimiento con carbonato de litio. Puede desplazar a los hipoglucemiantes orales de su unión a proteínas, dando lugar a un aumento del efecto hipoglucemiante. Disminuye la excreción renal de metotrexato dando lugar a un aumento de la concentración plasmática de éste.

Contraindicaciones.

Antecedentes de hipersensibilidad a indometacina, salicilatos y otros antiinflamatorios no esteroides. Ulcera gastroduodenal activa. Lesiones gástricas recurrentes. Primer trimestre del embarazo. Lactancia. Niños menores de 14 años.

Principios activos que interaccionan con Indometacina

Medicamentos que contienen Indometacina