Magnesio óxido

Sinónimos.

Magnesia.

Acción terapéutica.

Antiácido, laxante hiperosmótico salino.

Propiedades.

El óxido de magnesio reacciona químicamente con el ácido del estómago, pero no interviene en su producción. De esta manera aumenta el pH del contenido estomacal, aliviando los síntomas de la hiperacidez. Esta droga reduce el contenido de ácido en la luz del esófago, esto produce un aumento del pH intraesofágico y una disminución de la actividad de la pepsina, lo que contribuye al control del reflujo gastroesofágico. El comienzo de acción de esta droga es rápido debido a su alta capacidad de solubilizarse en el estómago y por lo tanto, de reaccionar con el ácido clorhídrico. Como laxante, el óxido de magnesio llena la cavidad del intestino delgado con agua por efecto osmótico. La acumulación de agua produce distensión, aumenta el peristaltismo y la evacuación intestinal. El efecto laxante se potencia por el aumento de la liberación de colecistoquinina. La eliminación del óxido de magnesio es fecal y renal.

Indicaciones.

Síndromes acidopépticos, úlcera péptica, reflujo gastroesofágico, hemorragia gastrointestinal como consecuencia de gastritis aguda y ulceración por estrés, estreñimiento, evacuación intestinal en el tratamiento de parasitosis intestinales y toxicidad inespecífica.

Dosificación.

Dosis usual para el adulto: antiácido: tópico, para neutralizar 1mEq de ácido clorhídrico se necesitan de 15 a 20mEq de óxido de magnesio. El óxido de magnesio, en el tratamiento de la úlcera péptica, es aconsejable administrarlo entre 1 a 3 horas después de las comidas para prolongar el efecto neutralizante y al acostarse. Asimismo, la terapia debe continuar al menos durante 4 a 6 semanas después de la desaparición de los síntomas. Laxante: se recomienda beber aproximadamente 240ml de agua con cada dosis para evitar la deshidratación y no tomarlo 2 horas antes o después de las comidas ya que pueden intervenir con la ingesta de los alimentos.

Reacciones adversas.

Sabor a tiza, náuseas o vómitos, calambres en el estómago, confusión, latidos cardíacos irregulares, calambres musculares, cansancio o debilidad no habituales, mareo o sensación de mareo.

Precauciones y advertencias.

No debe administrarse en los niños menores de 6 años, debido a los riesgos de hipermagnesemia.

Interacciones.

Anfetaminas o quinidina, esteroides anabolizantes, anticoagulantes orales derivados de la cumarina o la indandiona, antidisquinéticos, antimuscarínicos (especialmente la atropina y sus derivados), benzodiazepinas, fosfato sódico de celulosa, cimetidina o ranitidina, diflunisal, glucósidos digitálicos, efedrina, preparaciones orales de hierro, ketoconazol, levodopa, loxapina oral, mecamilamina, metenamina, lipasa pancreática, fenotiazinas, fosfatos orales, salicilatos, resina de poliestiren, sulfonato sódico, sucralfato, tetraciclinas orales, tioxantenos orales, vitamina D, diuréticos ahorradores de potasio o suplementos de potasio, poliestirensulfonato sódico, laxantes suavizadores de las heces.

Contraindicaciones.

Disfunción renal severa, apendicitis, colitis ulcerosa, colostomía, diverticulitis, ileostomía, diarrea crónica, obstrucción intestinal, micción dolorosa o dificultosa, deshidratación, hemorragia rectal.

Sobredosificación.

Los síntomas de la sobredosis con óxido de magnesio son los siguientes: diarrea o efecto laxante, mareos o sensación de mareo, latidos cardíacos continuos, cambios en el estado de ánimo o mental, cansancio o debilidad no habitual.