Sotalol
Acción terapéutica.
Antiarrítmico. Antianginoso.
Propiedades.
Es un agente betabloqueante no selectivo con propiedad antiarrítmica (clase II y clase III). Su mecanismo de acción se debe a que prolonga uniformemente la duración del potencial de acción en todos los tejidos cardíacos, lo que retarda la fase de repolarización sin afectar la despolarización de la fibra. Debido a su carácter betabloqueante adrenérgico provoca la reducción de la frecuencia cardíaca (cronotropismo negativo) y una discreta disminución de la fuerza de contracción ventricular (inotropismo negativo), lo que genera una reducción del consumo de oxígeno miocárdico y del trabajo cardíaco. Como otros betabloqueantes, inhibe la liberación de renina tanto en reposo como durante el ejercicio hasta 24 horas después de la administración de una dosis única. Una característica del sotalol es que está desprovisto de actividad simpaticomimética intrínseca y de acción estabilizante de membrana. Estudios hemodinámicos en arritmias cardíacas mostraron que el sotalol, en dosis de 160mg, reduce la frecuencia (21%-24%) y la presión arterial sistodiastólica (8%), pero aumenta la fracción de eyección (6%-10%) y el volumen sistólico (10%-20%). Luego de su administración por vía oral este agente betabloqueante no selectivo se absorbe en forma significativa y su biodisponibilidad es mayor de 90%; los niveles séricos máximos se alcanzan entre las 2,5 y 4 horas y su estabilización plasmática en 2 a 4 días. Tiene una biodisponibilidad bicompartimental con una vida media de eliminación de 7 a 15 horas. No se liga a las proteínas plasmáticas ni sufre biodegradación metabólica en el organismo. Se difunde poco a través de la barrera hematoencefálica (sólo alcanza concentraciones del 10% de los niveles séricos) y se elimina preferentemente por vía renal en forma inalterada.
Indicaciones.
Arritmias cardíacas. Taquicardia ventricular grave, taquiarritmias, taquicardia paroxística. Arritmias provocadas por exceso de catecolaminas circulantes. Angina de pecho. Posinfarto de miocardio.
Dosificación.
Como antiarrítmico: 80mg cada 12 horas. En sujetos con función miocárdica reducida se emplearán 40mg 2 veces por día. La dosis antiarrítmica máxima es 640mg por día. El rango de dosis aconsejado para la mayoría de los pacientes oscila entre 160 y 640mg diarios. Como antianginoso: 160mg por día y luego de una semana de tratamiento se puede aumentar semanalmente al doble (320mg/día). La dosis inicial deberá determinarse para cada paciente en particular mediante el control hemodinámico y cardíaco.
Efectos secundarios.
Es un fármaco bien tolerado, si bien algunas reacciones secundarias se han señalado en forma ocasional, como disnea, mareos, cefaleas, astenia, bradicardia, hipotensión arterial, fiebre, que desaparecen con la reducción de la dosis o la supresión del tratamiento. En el 1% de los pacientes se señaló una prolongación excesiva del intervalo QT.
Precauciones y advertencias.
Se aconseja un cuidado especial en sujetos sometidos a anestesia general con ciclopropano por la posible potenciación cardiodepresora. En sujetos diabéticos, el sotalol puede enmascarar algunos signos clínicos (taquicardia) de la hipoglucemia aguda o del hipertiroidismo. En sujetos con insuficiencia renal la dosis debe reducirse teniendo en cuenta los valores de la creatininemia. Durante el embarazo sólo debe usarse en casos de extrema necesidad y previa evaluación del riesgo-beneficio. Como el sotalol es excretado por la leche, se considerará esta posibilidad para el lactante en caso de amamantamiento materno. Se ha observado hiperreactividad adrenérgica en sujetos en los que se suprimió bruscamente el fármaco, por ello se recomienda que la discontinuación del tratamiento sea progresiva y gradual durante un período de 1 a 2 semanas monitoreando cuidadosamente (monitoreo cardiovascular) la actividad miocárdica.
Interacciones.
Con antagonistas del calcio: sinergismo en la conducción AV y función ventricular. Los antiarrítmicos clase I (quinidina, procainamida, disopiramida) y clase III (amiodarona) no se deben asociar con sotalol ni depletores adrenérgicos (guanetidina, reserpina) porque puede reducirse en forma peligrosa el tono simpático, especialmente durante el reposo. Con diuréticos tiazídicos: pueden ocurrir hipopotasemia o hipomagnesemia, lo que aumenta las posibilidades de torsión de punta. Clonidina: puede potenciarse la hipertensión de "rebote", en especial al suspenderla, y es por ello que cuando se emplean betabloqueantes deben discontinuarse varios días antes de retirar la clonidina. Insulina e hipoglucemiantes orales: puede presentarse hipoglucemia o hiperglucemia y ello obliga a un cuidadoso ajuste de estos antidiabéticos. Los agonistas b2 (salbutamol, isoprenalina, terbutalina) pueden aumentar sus concentraciones séricas al asociarlos con sotalol. Antiarrítmicos (clase I), neurolépticos fenotiazínicos y antidepresivos tricíclicos deben emplearse con sumo cuidado al asociarlos con sotalol porque pueden generar arritmias graves (bloqueo AV, bradicardia severa), ya que se prolonga el intervalo QT.
Contraindicaciones.
EPOC. Asma bronquial. Bradiarritmias, shock cardiogénico, insuficiencia cardíaca. Bloqueo AV mayor de 2° grado. Insuficiencia renal, síndrome QT largo congénito o adquirido. Hipersensibilidad al fármaco. La seguridad y eficacia no fue establecida en pacientes menores de 18 años.
Sobredosificación.
La hemodiálisis reduce significativamente los niveles séricos del sotalol. Los síntomas de la sobredosis son bradicardia, broncospasmo, colapso, hipotensión arterial, insuficiencia cardíaca, hipoglucemia. Se aconsejan los siguientes recursos terapéuticos. Bradicardia grave, aplicar atropina IV. Bloqueo AV (2do o 3er grado), marcapasos cardíaco transvenoso. Hipotensión, adrenalina o isoproterenol. Broncospasmo, aminofilina, agonistas b2 en aerosol. Torsión de punta: sulfato de magnesio, marcapasos transvenoso.